SOLTANDO LASTRE

Me costó mucho claudicar y entrar en redes sociales. Bueno, en Facebook más bien, Tuiter siempre me gustó y fue la primera red social en la que me di de alta, pero con FB estuve resistiéndome años.
A mi lo que me gustaba era esto de los blogs, escribir, leer....pero escribir y leer cosas con cara y ojos, claro, cosas medianamente dignas. El tema es que cuando FB se popularizó tanto, la gente abandonó los blogs en masa y se pasaron a la red social por antonomasia.
En fin, adaptarse o morir, no?
En este tiempo que he pasado en FB tengo que admitir que no me ha gustado nada y que únicamente participaba porque casi todo el mundo que conozco estaba y me parecía la única manera de tener contacto con gente con la que, de otro modo, no tendría relación.
Al final, a principios de esta semana, tomé la decisión de alejarme de las redes sociales, y llegué a esa determinación por varios motivos:
1- Pasaba DEMASIADO tiempo conectada y pendiente. Tenía FB en el ordenador y en el móvil. Así que cuando estaba al pc lo tenía siempre abierto y era una distracción constante, pero es que en el móvil lo consultaba continuamente. Llegó un momento en el que estaba agobiada, me daba cuenta de que era como compulsivo, cada pocos minutos lo miraba.
2- Me he dado cuenta de que, por doloroso que pueda ser, la gente que no es capaz de relacionarse conmigo más allá de FB, igual no merece la pena. Y no es que no merezcan la pena como personas porque yo sé que sí, pero simplemente no se puede acercar a quien no quiere hacerlo. Y mantener unas pseudorelaciones, completamente insuficientes e insatisfactorias, sólo por tener algo con esas personas...estaba empezando a frustrarme mucho y a hacerme sentir bastante mal. Así que dejaré ir a todas aquellas personas que he intentado retener este tiempo.
3- El hecho de que parte de mi trabajo se desarrolle en redes sociales hace que deba mantener mi perfil y seguir utilizándolo, así que va a ser complicado, pero voy a intentar gestionarlo lo mejor posible. Esta era otra de las cosas que hacía que estuviera tan conectada, cuando la parte personal y la profesional se mezclan así, todo es muy complicado de gestionar y de separar adecuadamente.
4- FB me daba una falsa sensación de amistad, de compañía, de integración. Siempre me he sentido muy alejada de la gente, nunca he conseguido adaptarme y encajar en ningún grupo o ambiente...y ahí parecía que sí lo hacía. Un gran error por mi parte porque al final me doy cuenta de que estas relaciones, esta gente, estos grupos...no son reales si sólo existen online. Y en mi caso, sólo existen online. Sigo igual de sola y de inadaptada que siempre. Lo malo es que estas pseudorelaciones, pseudoamistades, pseudogrupos, a mi me acabaron provocando más frustración que otra cosa, porque anhelo tanto este tipo de relaciones que éstas como que me ponían la miel en los labios y ya. Es un poco... como cuando estás muy muy cachonda y como estás tu sola te masturbas. Vale....pero no, verdad? Pues eso mismo.  Para vivir en un mundo de fantasía prefiero meterme en un libro tras otro, que por lo menos me aporta más de todo.
5- A mi me ha acabado afectando mentalmente porque el hecho de leer noticias, enlaces, opiniones, artículos diferentes, cortos, de temáticas mezcladas...Me ha desordenado la cabeza tremendamente. Era como mil cosas y nada a la vez. Un chupito y otro y otro y otro, y todos diferentes...y mi cabeza acaba con una borrachera tremenda. Necesito contenido, necesito dedicar tiempo y concentración a una cosa y una nada más. Y luego ya veremos, igual otra, o no, pero no cien cosas por minuto. Mi cabeza no da para semejante exigencia. Cerebralmente he acabado consumida, tengo que recuperarme de esto.
La diferencia entre la Sarai que abandona FB y la que entró "arregañadientes" es que ahora le tengo menos manía a la herramienta en sí. Ya no tengo nada en contra de FB, simplemente me he dado cuenta de que no es para mi. Seguro que hay gente que hace otro uso, o se gestiona bien y le va guay. No es mi caso así que me alejo sin el menor resquicio de manía o mala leche.
Ha sido por un lado una maniobra in extremis para salvar la integridad de mi cerebro y por otro lado un ejercicio de honestidad conmigo misma.
Continúo en FB para trabajar ( la idea es entrar una vez o dos al día para actualizar y hacer lo que corresponda y ya está ), mantengo Tuiter en mi ordenador, y mantengo Instagram en el móvil. Instagram es la única red social que no siento que me robe la energía, el tiempo y la esencia vital.
Lo que necesito es desengancharme del hábito que he adquirido de tener que estar mirando continuamente el móvil o el ordenador. Necesito liberarme de eso con urgencia, recuperar mi concentración, mi atención en una sola cosa, mi calma personal.
Si esto me va bien (que creo que sí porque en solo tres días estoy mucho mejo), con el tiempo retomaré  Tuiter en el móvil. Aunque seguramente haga una limpieza de personas o entidades a las que siga y me replantee la información que quiero obtener a través de ella y la que quiero compartir. Pero eso es para segundo de gestión personal de redes sociales, yo aun estoy en primero :)